Desde Unidos y Organizados Rosario queremos expresar nuestra solidaridad con los tres compañeros (Gastón Arregui, Carlos y Ariel Ferreyra) del Movimiento Evita baleados el pasado jueves 11 de enero en Nuevo Alberdi.
Como en los asesinatos de los militantes sociales Mercedes Delgado en Barrio Ludueña dos días antes, y de Jere, Patón y Mono en Villa Moreno hace poco más de un año, la connivencia entre los narcos y la policía santafesina en el negocio de la droga y el mercado ilegal de armas, sumado a la vista gorda de las autoridades provinciales y a la impunidad que garantiza el poder judicial, pone día a día en juego la vida de los pibes y de los más humildes.
Una vez más, queda en claro la negligencia del gobierno provincial al no garantizar ni siquiera la protección de la familia tras la amenaza realizada por los propios narcos para que levanten la denuncia sobre ellos, según relató el compañero Ramón Ferreyra, padre de dos de los pibes baleados.
La espiral de violencia que sufre nuestra ciudad tiene directamente que ver con la falta de decisión política del gobierno provincial para reestructurar la fuerza policial y desmantelar así los vínculos con el narcotráfico y el delito, reconocido en su momento por el propio Ministro de Seguridad Raúl Lamberto, al sostener que “No hay conducción política de la policía”, en medio del “narcoescándalo” y los episodios del pasado año, entorno a la renuncia del jefe de la policía provincial Hugo Tognoli.
Y, por supuesto, con la ausencia del Estado municipal y provincial en los lugares de la ciudad donde más se los necesita, el deterioro de las políticas sociales, la falta de obras públicas básicas y la negación de servicios públicos dignos a una parte significativa de nuestra sociedad.
Estas realidades son el telón de fondo del crecimiento exponencial del narcotráfico y las disputas entre bandas por el control de la venta de droga en el territorio en Rosario en los últimos años.
Por eso, son lamentables las declaraciones del gobernador Antonio Bonfatti, diciendo que desconoce la realidad de cada uno de los barrios de Rosario, como también ver a la intendenta Mónica Fein haciendo anuncios para los medios que nunca se concretan o poco tienen que ver las necesidades más urgentes que atraviesan la ciudad.
Estamos convencidos, como dijo la compañera Cristina, que no hay mejor lugar para la juventud y el pueblo que la política. Entendemos que este es el camino para que nuestros pibes puedan recuperar un proyecto de vida como horizonte. Son nuestras banderas, la Unidad, la Organización y la Solidaridad con los sectores populares y en el territorio, el camino para cambiar la realidad, luchar contra la impunidad y transformar las necesidades en derechos e igualdad de oportunidades para todos los habitantes de nuestra ciudad.
UNIDOS Y ORGANIZADOS – ROSARIO.
13 de enero, 2013.
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